En la familia de mi esposa son diez parejas las que componían los diez hermanos que eran, tres varones y siete mujeres, desde la mayor a la menor todas se encuentran casadas, hoy día ocho de Diciembre, la hermana mayor cumple los ochenta años, estamos en el año 2014, la diferencia entre ella y la más pequeña es casi de veinte años aproximadamente.
Con una media de tiempo de unos dos años fueron naciendo todos y cada uno de ellos, la primera de los diez nació el día ocho de Diciembre del año 1934 y le pusieron de nombre el santo del día, Concha, día de la Purísima Concepción, y por el siguiente orden fueron naciendo el resto de los hermanos: Jesús, Feliciana, Manuel, Manuela, Josefa, Marcelina Emilia, Diego, María del Carmen, aunque a esta siempre se le ha llamado Milagros, y Remedios.
Los diez hermanos se casaron formando su pareja, su hogar y su propia familia, y así han vivido durante varios años. Todas las parejas han tenido descendientes.
Concha, casada con Pedro, tuvieron cuatro hijos, Juan Pedro, María Asunción, Jesús, y Víctor; por desgracia quedó viuda hace ya bastantes años, y, por si faltara poco, hace ya dos años falleció su hijo Jesús.
El segundo de los hermanos, Jesús, se casó con Fina y tuvieron cinco hijos, María Jesús, Manoli, Josefina, Jesús, y Reme; en este matrimonio también hay que lamentar la muerte del cabeza de familia.
El tercero de los hermanos, Feliciana, se casó con Pepe y de su matrimonio nacieron tres hijos, José, Pilar e Inmaculada; también en este matrimonio hay que lamentar la muerte de Feliciana.
El cuarto hermano, Manuel, casado con Fina; de su matrimonio nacieron tres hijos, Manoli, Jesús, y Perico, gracias a Dios en este matrimonio no hay que lamentar ninguna muerte todavía.
El quinto de los hermanos, Manuela, casada con Juan, tuvieron cuatro hijos, Juana, Manoli, Joaquín, y Maria Jesús. Tambíen en este matrimonio hay que lamentar la muerte de Juan.
El sexto de los hermanos, Josefa, casada con Vicente, tuvieron cinco hijos, Javier, Jesús, Reyes, Ismael, y Roberto. También en este matrimonio hay que lamentar la muerte del cabeza de familia, fue el primero que rompió pareja.
Séptima pareja, Marcelina Emilia, casada con Juan (el que está escribiendo este relato), se unieron en matrimonio el día tres de Mayo del año 1969, día de la Santa Cruz.Tuvieron dos hijos, Juan, y María José. En este matrimonio todavía no hay que lamentar víctima alguna.
Octavo hermano, Diego, casado con Remedios, de este matrimonio nacieron dos hijas, Mónica y Ana Belén, viven gozando de sus hijas y nietos.
Noveno hermano, María del Carmen, casada con Antonio; tuvieron cuatro hijos, José Antonio, María del Mar, María del Carmen, y Laura; en este matrimonio también hay que lamentar la muerte del cabeza de familia a los 65 años, demasiado joven para desaparecer de la vida.
Decimo y último de los hermanos, Remedios, casada con Antonio, tienen tres hijos, Toni, Cristina, y David, esta pareja también disfruta de sus hijos y nietos.
Pues como habéis podido observar, de esta familia que provine de un matrimonio compuesto por, Jesús Riquelme Aparicio y Manuela Muñoz Martínez, se convirtió en diez matrimonios más y, de ellos, vinieron al mundo nada más ni nada menos que la cantidad de 35 nietos.
Por lo tanto, como ley de vida que es, unos vienen y otros se van, y los que todavía quedamos tenemos que disfrutar la poca o mucha vida que nos quede, y olvidar en todo lo posible los malos tragos que por circunstancias de la vida hemos tenido que pasar.
Los seres queridos que se nos han ido yo no si pensarán en nosotros, pero lo que sí puedo asegurar es que los que quedamos sí pensamos en los que se nos han ido.
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